Baby quiere que sea bibliotecario
¿Qué hace Golfo leyendo el Manual de Biblioteconomía y Documentación (Psykana Librarius)? Pues resulta que Baby, carente de atención en sus días libres, me ha propuesto que me prepare las oposiciones a Bibliotecario en cuanto me licencie. Hmmm, dije, Bibliotecario ¿Acaso creéis que me he imaginado a mí mismo con gafas y cara de ratón de biblioteca? ¡Jamás! ¡Yo me pido ser bibliotecario pero de los Marines Espaciales (con perdón por la publicidad por la gorra... es que me han hecho firmar un contrato por el que citaría todas las fuentes de imágenes con derechos de autor... y eso que no gano un céntimo con este blog): ¡Poderes Mentales! ¡Respeto de todos esos cazurros de dos metros que visten armadura de adamantium y portan enormes armas automáticas! ¡El Bibliotecario Golfus empolla los manuales para entrar en el Capítulo! ¡Conocer el verdadero nombre de los Dioses del Caos (Cecil, Martin, Skip y Ed)!
Todo viene por la maravillosa experiencia que Baby está viviendo en la Biblioteca de la Facultad de Matemáticas. Hora para comer, descansos para el cigarrito... los mayores problemas a los que se enfrenta son los ruidos y extrañas peticiones que le hacen los individuos pálidos, ojerosos y llenos de acné del Club de Rol de esa Facultad (que al parecer es la única que cuenta con un club de Rol en toda la UCM... recalco lo de al parecer). ¿Que te aparece uno de ésos a preguntarte por algo raro?
- Olvídese de frases como La Culpa la tiene el Chino (el chino que habita dentro de cada ordenador y le dice a todo el mundo lo que debe o no hacer... (conociéndolos probablemente se trate de un Coronel del Ejército Popular... detrás de todo hay un Coronel chino).
- Deje de lado la parsimonia o la prepotencia de según qué bibliotecarios (nosotros no te prestamos ningún libro: Lo hace El Chino) o de lo contrario podría ser víctima de un ataque mágico de energía mental tras la tirada de rigor de un dado de veinte (o más) caras.
- Utilice astutamente el comportamiento del rolero en su contra: Así que quieres que El Gran Chino te conceda visionar el Rolerum Librarium... se lo rogaré, pero antes has de responderme a estos tres enigmas... (Indique aquí las tres preguntas más absurdamente complicadas que se le ocurran tras pasar 36 horas sin dormir).
Por lo demás las condiciones de los bibliotecarios no son malas: Pagas extra, jornadas 35 horas a la semana, un mes al año de vacaciones más 12 días libres a discreción, y mil excusas para pillar bajas: Cambio de domicilio, Maternidad/Paternidad, Asuntos Familiares, Matrimonio, Cambio de Religión... (en realidad se llama festividad religiosa exótica), bajas por enfermedad (que incluyen las que te dan por coger una tendinitis en el dedo índice de tanto jugar al Solitario Spider), nacimiento de hijos, muerte de un familiar de hasta segundo grado de consanguineidad (permite tener seis abuelas en Australia, Bali, Cuba, El Cabo, Moscú y Benidorm) y los festivos normales en los que todo el mundo (excepto los seguratas) libra.
Si a eso le añadimos la coña de los poderes mentales y la armadura de adamantium de los paladines de la humanidad, he decidido que sí: Quiero ser Bibliotecario.
4 comentarios
Golfo -
El abuelo -
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El abuelo -