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Me Cago En Mi Vida

Ideas y Teorías para hacerse rico trabajando de becario

Ideas y Teorías para hacerse rico trabajando de becario

Currar de becario en una redacción es algo maravilloso. Veréis: Llegué acojonado con una teoría, cuanto menos cobras, más te gritan... cuando curraba en el Burger a media jornada (cuarenta horas semanales son jornada completa, treinta son media jornada sin un fin de semana libre en meses... la opción de las dieciséis horas semanales es respondida con un ¡Siguiente!) mi trabajo consistía en recibir gritos durante seis horas al día, cinco días a la semana por menos del sueldo mínimo. Currando de tarjetero era tres cuartos de lo mismo, pero cobrando mucho menos y recibiendo gritos por parte de analfabetos funcionales que aprendieron a leer en la cárcel y que se creen grandes empresarios por haber abierto un tugurio en una zona de marcha... en PROSEGUR estaba a mi bola, cobro un pastón (para mí es un pastón por currar sólo los fines de semana) y no he visto a un superior gritón desde que empecé.  Hasta la PROSEépoca la única excepción a la fórmula cobrar poco = recibir gritos era Ronaldo... y ese gordo cabrón se lo merece por vago.

Ahora paso las mañanas haciendo turnos de cinco horas por 150 al mes, sentado ante un ordenador cabezón que me recuerda a los caballos de los malos en los Westers: Llega un momento en el que no pueden caminar más, el cowboy malo se baja y, en gesto humanitario, lo cose a tiros para que no sufra. Hasta que no saque mi licencia de armas Tipo C (es broma, mamá) tendré que limitarme a darle gomazos. El hecho es que debería colgar uno de esos carteles de las pequeñas empresas americanas: Sin accidentes laborales desde..., pero en mi caso sería un Sin gritos del jefe desde hace dos semanas. ¿El secreto? Mi jefe hace el turno de tarde junto a una atractiva becaria...

Hay días en lo que lo primero que me encuentro es una nota de la bella becaria gallega dejándome trabajo pendiente (sólo una comadreja puede parar a otra comadreja... ¡Touché!) Y uno de esos informáticos que, a parte de tratar de descubrir si soy yo quien abre la puerta a una horda de gusanos informáticos (me refiero a esa especie de virus) usando el Messenger, y que me instala software de impresora para que el cabezón vaya aún más lento. ¿Otra comadreja? Se supone que entre comadrejas nos olemos a distancia...

La primera idea que se me ha ocurrido es un nuevo sistema, tipo Fight Club para saber en qué día de la semana me encuentro... en la película, el protagonista se fijaba en el color de la corbata del jefe... yo lo calculo a través del color del pantalón que me lleva culo estupendo, ese tipo de pantalones en los que las chicas entran y salen, cuando se visten y desvisten, gracias a alguna variante gigantesca del calzador.  He elaborado una tabla:

-         Lunes: Azul añil

-         Martes: Blanco semitransparente

-         Miércoles: Negro azabache

-         Jueves: Negro brillante, con matices de gris oscuro

-         Viernes: Malva claro, tipo Milka (la asociación de las posaderas de culo estupendo con el chocolate con leche suizo es meramente accidental)

 La segunda fase del Programa Estrago en la Oficina trata de montar una red de contrabando a lo patio de la cárcel en la redacción. Para ello estoy acaparando azúcar y material de oficina en el escritorio del jefe... ¿Que hay problemas? La culpa es del jefecillo. La única traba es un bol con azúcar de los bebedores de té (sabría que me traerían problemas... no como los cafeinómanos de quienes sé que no me fallarán). Una idea ha venido a mi mente: Hacer como que voy a enviar algo por FAX (porque he aprendido a usar un FAX...) y darle un codazo accidental, provocando así una crisis de desabastecimiento. ¡No queda azúcar para las infusiones! Queda... pero te va a costar una cajetilla de Malboro por cada sobrecito.

Luego se me ha ocurrido crear una empresa de venta de recuerdos artificiales a lo Desafío Total... la idea me la dio ver a un compañero, diseñador gráfico, preparar la portada del primer número de Seniornet. La mujer de la portada parecía demasiado joven y le encargaron añadirle algunas arrugas a su frente con el Photoshop... ¡Verídico! Así que se me ocurrió que, igualmente, cuando Herr Friedrich y Frau Heder viniesen a España a hacer turismo, quizá deseasen llevarse una foto de recuerdo en la playa: Él luciendo tanga fosforito y cuerpo hipermusculado, y ella con un tipito de 25 años y un par de enormes peras. Como coartada legal, para mis negocios clandestinos en la oficina, no está mal.

Finalmente, la última idea me la dieron los anuncios de la Renault Kangoo con el Tren Valencia y Amunike. ¿Qué clase de de mafioso de cubículo sería sin montar un negocio de apuestas clandestinas? He propuesto hacer una porra sobre le próximo futbolista-pufo que protagonizará un anuncio de la Kangoo. Las principales apuestas señalan a Robert Prosinecki y a Christophe Dugarry.

Más información en el próximo boletín (jejeje)

7 comentarios

Golfo -

Si quieres ver una foto del autor de "El Club de la Lucha", Chuck Panahiuk, (me refiero a la novela) echa un vistazo al Blog "The Steam Monkey", que encontrarás enlazado a la derecha y abajo...

Damian -

QUE BUENA "el club de la lucha" buf anda que no andaras motivadillo en el curro eh? jejeje culete por aqui culete por alla...mmmmm jejeje


un saludo!!

Golfo -

Que estçe sobre aviso... como se acostumbra a partes iguales: Para él el trabajo y para mí la pasta.

El abuelo -

¿Ya has llamado al Gurú?, si no le has localizado, ya lo intento yo

Golfo (aun más) -

He considerado también acaparar y especular con material de oficina, pero requiere un plan más complejo: Un incendio controlado en el almacén de material y el secuestro de varios proveedores... ¡Todo se andará!

Golfo -

A propósito, mamá: El jefe parece contento conmigo. Dice que va a jubilar al "Cabezón" y a ponerme un ordenador nuevo, con monitor TFT y todo... es que me invitó a comer el otro día a un Ristorantte de esos caros, y me interrogó sobre mis libros.


¡Hablando de libros! ¡Gurú! ¿Compra un billete para Madrid! ¡Puede que tengamos trabajo! ¡Y al contrario que El Primo éste paga bien!

Golfo -

Ah, otra compañera, también de muy buen ver, del Departamento de Comunicación me ha enseñado a enviar el boletín... nuevas ideas de estragos nacen en mi mente...